El objetivo que nos proponemos para este curso es “REVITALIZAR LA COMUNIDAD CRISTIANA PNS”. Lo vamos a ir abordando a través de diversos aspectos concretos de la vida de la comunidad, cada semana, hasta llegar al Adviento.
Pero hay una idea central que nos acompañará durante todo el año. Algo así como un lema que pretendemos grabar con fuego en nuestros corazones: “SER PARA LOS DEMÁS”. Trataré de explicarte un poco porqué hemos escogido esa idea central.
Se trata de una actitud. Es, junto con la celebración de la Eucaristía, que conlleva la centralidad de Jesucristo, un elemento clave para construir una verdadera comunidad cristiana. Solo el servicio, basado en el amor fraterno, que son los dos elementos claves de la última Cena de Jesús y, por lo tanto, de la Eucaristía, puede dar la verdadera dimensión de nuestro compromiso cristiano. Que se trata, del seguimiento de Jesús en comunidad, única manera posible.
SER PARA LOS DEMÁS, implica servicio. Pero significa reconocer que uno posee unos dones o cualidades (junto con otras carencias) que ha recibido de Dios y que no son para nosotros mismos, sino para ponerlos al servicio de los demás. De todos los hijos de Dios.
Si lo piensas bien, esa es la única razón de los dones que tienes: compartirlos con los demás. ¿De qué te vale tener una voz y un oído excelentes, si no cantas para que otros lo valoren y disfruten? ¿De qué te valdría tener 26 millones de euros, si te quedas encerrado con ellos en una habitación sin conexión exterior?
Los dones o bienes que tienes, sólo cobran su sentido si los compartes.
Pues bien, este compartir lo que somos y lo que tenemos, es lo que puede hacernos crecer como personas, y como comunidad cristiana de la Parroquia Nuestra Señora del Sagrado Corazón.
Es importante que detectes dos cosas: ¿Qué dones o cualidades he recibido de Dios?¿Cuáles son las necesidades de la comunidad?
Una vez eso esté claro, ya sólo falta tu libre decisión. “Ser y vivir para ti mismo” o “Ser y vivir para los demás”.
P. Manolo Barahona, MSC
Párroco